No tienes derecho a trabajar de lo que quieras
No tienes derecho a trabajar de lo que quieras. Vuelve a leerlo. Es duro de escuchar, más aún de interiorizar. La vida y el mundo real son así de crudos.
El pasado fin de semana se ha celebrado la gala de los Goya 2025. Entre la miríada de discursos y reivindicaciones políticas. La mayoría de los homenajeados aprovecha su minuto de gloria recogiendo el premio para pronunciar un discurso habitualmente cargado de reivindicaciones políticas y sociales. También los hay que emplean las entrevistas con la prensa previas al evento para dicho propósito.
Y, entre todos esos discursos, hay uno que me llama especialmente la atención. Aquel en que reivindican más trabajo para los actores y más fondos (públicos) para financiar sus películas. Un vídeo que se hizo particularmente viral y que cada año sale a colación, es este minuto de Eduardo Casanova en los Goya de 2020:
Un ejemplo más reciente, de este mismo año, es el de Aitana Sánchez-Gijón. "Solamente el 7% de los actores pueden trabajar de esta posesión. Los premios, genial. Pero, por favor, trabajo para todos":
El principal problema de estas peticiones es que reclamar más dinero público es algo muy etéreo. Parece que, como decía la ministra Carmen Calvo, "el dinero público no es de nadie". Y esto es falso, el dinero público es de todos los españoles que contribuimos al sistema. Para financiar una película con esos fondos, ha tenido que reducirse la cantidad de euros que cualquier otro trabajador se mete en el bolsillo a final de mes.
Tenemos que plantearnos si esto es justo. ¿Por qué un fontanero, al que nadie le ha dado dinero para comprar sus herramientas de trabajo, ha de entregar parte de sus ingresos para financiar el tuyo? Yo, no me considero muy liberal. Para mí, hay unas partidas que me parece bien que sean públicas (educación, sanidad, infraestructuras, defensa...). Porque todos, en mayor o menos medida, haremos uso de ellas a lo largo de nuestra vida y porque son indispensables para garantizar una mínima calidad de vida para todos. Pero de ahí a pagarle rodajes a todo el que quiera dedicarse a la actuación hay un trecho. Especialmente, cuando muchos de esos rodajes son deficitarios.
Pero esta historia va más allá del mundo del artisteo. Por ejemplo, en la Sexta Xplica esta chica se queja de que tiene una carrera y dos máster y que no encuentra trabajo. Cuando dice que estudia periodismo, un colaborador le indica que ha elegido la carrera incorrecta y se oye un abucheo del resto.
Podemos indignarnos tanto como queramos, pero no podemos olvidar esta premisa: No tienes derecho a trabajar de lo que quieras. Vuelve a leerlo. Es duro de escuchar, más aún de interiorizar. La vida y el mundo real son así de crudos. El mercado tiene unas necesidades y no las dictas tú. Si en España hacen falta X periodistas al año y se licencian X+1000, habrá 1000 periodistas que no encontrarán trabajo de ello.
La frase del presentador es brutal: "debería tener el periodismo las mismas garantías de encontrar un trabajo digno que otras profesiones". La afectada replica: "¿valen más unas profesiones que otras?". Sí, algunas profesiones tienen más demanda porque hacen falta profesionales con ese perfil. Y, volvemos al punto anterior uniéndolo con el principio del artículo. Si queremos garantizar las mismas oportunidades laborales a todas las personas independientemente de lo que estudien, ¿cómo lo logramos? ¿Haciendo que los que han elegido carreras demandadas tengan que financiar a los que no?
Nuestra mejor opción es entender la realidad a la que nos enfrentamos, analizar qué podemos hacer con nuestros conocimientos para adaptarnos a lo que ésta nos exige y dar lo mejor de nosotros para progresar por ese camino. Tomar responsabilidad de nuestras acciones y decisiones y seguir trabajando para orientarlas a lo que nos puede garantizar un mejor futuro. Y, si hay algo que te apasiona, pero que no puedes monetizar lo suficiente como para transformarlo en tu medio de vida, hazlo como hobby. Elige un trabajo que no odies, con el que puedas convivir, y dedica tu tiempo libre a desarrollar esa otra pasión.